Un libro homenajea la labor de la arqueóloga Mercedes Unzu

El volumen recoge 25 artículos escritos por 33 investigadores, de 20 instituciones, que trabajaron con la historiadora navarra

JESÚS RUBIO
Pamplona

Ya cuando era una joven arqueóloga, Mercedes Unzu Urmeneta (Pamplona, 1949) se convirtió en una experta en la romanización y sobre todo en la cerámica, de la mano de su maestra María Ángeles Mezquíriz. Trabajó en Iturissa, la ciudad romana que existió cerca de Burguete, pero también ha investigado el pasado de Pamplona o de lugares como la presa del Congoso, en Mues, entre muchos otros sitios. 

Pero Unzu, fundadora de Gabinete Trama en 1980, ha destacado por otras facetas de su oficio. Por ejemplo, por llevar a cabo lo que los historiadores llaman la arqueología de gestión. “Se trata de que el trabajo termine siempre en generación de conocimiento histórico. Eso no es tan habitual, no siempre el trabajo trasciende a la sociedad”, apunta uno de sus colegas, Javier Andreu Pintado, catedrático de la Universidad de Navarra y uno de los editores, junto a Javier Martínez Sarasate, también arqueólogo formado en la UN, y María J. Peréx Agorreta, profesora de la UNED, del libro homenaje a la arqueóloga pamplonesa que se presentó ayer en el Museo de Navarra, en un acto al que acudieron muchos de los historiadores que colaboraron con Unzu a lo largo de su carrera. 

Andreu destaca otros rasgos que caracterizan el trabajo de la arqueóloga. Uno, la “perspectiva global” que le llevo a presentar resultados en congresos nacionales e internacionales. “Ha cumplido algo que la arqueología tiene que conseguir siempre, ser una ciencia comparativa”. Dos, su “capacidad para crear equipos”. “Cuando en una excavación aparecen materiales que uno no sabe estudiar, a veces se apartan o no se les da difusión. Mercedes, cuando sabía que era relevantes, los ponía en manos de otros expertos. Esa capacidad de colaborar con los cole- gas es ejemplar”, abunda el catedrático de la UN.

El libro, en todo caso, no se limita a ensalzar la figura de Mercedes Unzu. También ha reunido 25 textos, contribuciones relativas a la prehistoria, la historia antigua, la medieval o la del arte, escritos por 33 investigadores de 20 instituciones, entre ellos las tres universidades navarra o arqueó- logos que trabajan en el Gobierno de Navarra o en el gabinete Trama. “A todos los autores les une que han trabajado con Mercedes Unzu”, apunta Javier Andreu, que añade que el homenaje cuenta también adhesiones de otros expertos que han colaborado en alguna ocasión con la arqueóloga navarra. “También quisimos que se cubrieran todos los periodos históricos en los que ha trabajado”. 

El color de Pompelo 
Entre todos esos artículos recopilados en Del registro arqueológico al museo: el camino de la Historia, el volumen que ha editado Eunsa con apoyo de la Facultad de Filoso- fía de la UN, aparecen algunas novedades y aportaciones a la historia de Navarra. Por ejemplo, un trabajo sobre “el color de Pompelo”, sobre los materiales marmóreos que procedían del Mediterráneo oriental y que se han encontrado en las excavaciones de la Pamplona romana. “Demuestra que en la construcción del foro no se escatimaron recursos, que se quería hacer de Pompelo una pequeña Roma”, dice Andreu. También se presentan artículos sobre una llave romana inédita procedente de Ujué, sobre anzuelos y útiles de pesca del puerto romano de Oiasso, en lo que hoy es Irún o el análisis de huesos de diversos enterramientos de época medieval y moderna de Navarra correspondientes a cadáveres con signos de enfermedades o patologías.

‘DEL REGISTRO ARQUEOLÓGICO AL MUSEO: EL CAMINO DE LA HISTORIA’ 
Editores: Javier Andreu, Javier Martínez Sarasate, Ma Jesús Peréx.
Editorial: Eunsa.
Páginas: 396
Precio: 24,90€